Momo crece contigo y tu bebé, es un gran aliado para el embarazo, cuando ya no encontrás acomodo con la panza, almohadón de lactancia, se hace nido de contención, chichonera, almohadón de piso, guardián del sueño....
Gracias a su flexibilidad, siempre encontrás la forma en la que mejor te ayude a alimentar a tu bebé, ya sea que tome la teta o la mamadera, en la posición en la que prefieras hacerlo. Cuando tu bebé empieza a incorporarse, momo juega en el piso y se convierte en muro de contención de las posibles caídas, amortiguándolas.
Para la etapa bebe: su cuerpo texturado, crestas de colores y cola con cascabelito estimulan el tacto, la vista y el oído.